Os propongo preparar unos bollitos de pan en forma de tortuga, para acompañar sus desayunos, meriendas o fiestas infantiles.
Son unos panecillos muy tiernos que admiten muy bien tanto dulce como salado, de manera que los podéis rellenar por la parte inferior o por un lateral con una boquilla de rellenar con crema de cacao, confitura de frutas, patés o cremas saladas. También lo podéis abrir con un cuchillo y colocar el relleno que más os guste tipo bocadillo. O simplemente los podéis acompañar de unas ricas y energéticas onzas de chocolate.
La receta que os traigo hoy es del excelente panadero español Daniel Jordá, con el que tuve la oportunidad de aprender, de primera mano en su obrador, los secretos de la elaboración del pan con unos amasados muy cómodos, sin esfuerzo y con una textura impresionante.
Ingredientes (12-15 unidades aprox.)
500g de harina de fuerza
10g de sal
250g de leche
50g de agua
30g de miel suave
30g de levadura
15g de aceite de oliva virgen
Preparación
Mezclar en un bol todos los ingredientes y amasar sobre una superficie aceitada, introduciendo las puntas de los dedos en la superficie de la masa y luego haciendo una bola que dejaremos reposar 10 minutos.
Estirar la masa y hacer varios dobleces en ella de abajo a arriba, y girar de manera que los dobleces queden en la parte de la mesa de trabajo. Dejaremos reposar la masa 10 minutos y repetiremos la operación otra vez 2 veces más, con tiempos de reposo de 10 minutos entre ellas. Podéis ver aquí cómo hacer el proceso de amasado.
Precalentar el horno a 200ºC. Hacer bolitas más grandes para los cuerpos de las tortugas, bolitas pequeñas para las patas y bolitas para las cabezas, y pegarlas a los cuerpos pincelando con un poco de agua y dejando reposar 45 minutos tapadas con un paño limpio y libres de corrientes.
Finalmente pincelar con huevo batido y hornear durante 15 ó 20 minutos, hasta que estén doraditos.
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